El trabajo remoto sigue siendo una amenaza, ya que los empleados de toda Europa admiten sus propias malas prácticas de ciberseguridad. Una encuesta realizada por OneLogin reveló que el 17 por ciento de los trabajadores comparte la contraseña de su dispositivo de trabajo con sus hijos, mientras que el 36 por ciento no había cambiado su contraseña de WiFi en más de un año. Las cifras fueron aún peores en el Reino Unido, donde el 50 por ciento admitió este defecto. En el lado positivo, el 70 por ciento de las empresas del Reino Unido utilizan VPN.