Los datos personales de 129.000 clientes y 23 empresas quedaron expuestos en un ciberataque de 2020 a una empresa de telecomunicaciones. Optus, con sede en Australia, reveló en septiembre que 10 millones de clientes habían estado expuestos a una violación de datos, pero desde entonces ha salido a la luz que se realizaron otros dos ataques contra su empresa matriz, Singtel. Los piratas informáticos habían explotado una vulnerabilidad de día cero para obtener datos confidenciales, que luego se publicaron en un foro público.