By MyCena | Posted on: 19 febrero 2024
Los hackers «roban tu rostro» para crear deepfakes que roban cuentas bancarias.
Al no existir forma de validar la identidad a partir de los datos biométricos de los usuarios, los sistemas financieros están enormemente expuestos al fraude por robo de identidad.
La autenticación biométrica es una alternativa práctica al código PIN, pero no más segura. ¿Por qué? Porque tus huellas dactilares, tu rostro y tu voz no son secretos.
=> Los datos biométricos están siendo cada vez más recopilados, almacenados y analizados por actores maliciosos.
=> Al explotar las bases de datos de vídeo de las cámaras IP, los hackers pueden recopilar fragmentos del iris y las huellas dactilares y "con suficiente repetición, potencia de cálculo y tiempo, pueden potencialmente descifrar los datos biométricos completos de una persona".
Los datos biométricos son útiles para la autenticación presencial, pero muy peligrosos para la autenticación remota. Son como una clave compleja. Una vez transmitidos, los usuarios no autentican los datos biométricos reales, sino que verifican algo muy parecido a una contraseña.
Nuestro sistema financiero se basa en una gran cantidad de confianza tácita pero no verificada. Esta situación se verá agravada por tecnologías como los deepfakes mientras nuestras instituciones bancarias sigan confiando en las copias biométricas transmitidas.